¿Como aprendes a ser maestra?

BIENVENIDOS UNA VEZ MÁS A MI BLOG SOBRE LAS TECNOLOGÍAS

Hola a todos y a todas y gracias una vez más por continuar leyendo mi blog y aprendiendo cada semana un poquito más. En esta ocasión vengo a hablaros de un tema bastante complicado y a la vez interesante sobre todo en la Educación. ¿Cómo aprender a ser maestra? y a este titulo me gustaría añadir también un ¿y maestro?, ya que también hablaremos de las dificultades que tienen los hombres para trabajar en este tipo de ámbitos. 

Esta entrada surge a raíz de un texto propuesto en clase, el cual lo podemos relacionar con la película anteriormente comentada "la caza". El texto se llama ¿Cómo aprendes a ser maestra? Repensar el género en la Educación Infantil. Al final de esta entrada os pondré el link por si queréis leerlo.

El texto pretende reflejar la construcción de la identidad docente, sobre todo en relación con el género. Ya que como todos y todas ya sabréis, en ámbitos como la educación es muy notable ver la gran abundancia de presencia femenina, esto supone ciertos estereotipos no solo para la mujer, también para los hombres. Ya que al tratarse de una profesión relacionada con el cuidado, se es considerada de mujeres e incluso puede llegar a estar mal vista al realizarlo una persona del genero masculino. Por ello las cuestiones a tratar son ¿Por qué es considerara de mujeres?, ¿Por qué no hay tantos hombres en el mundo de la educación?, ¿Cómo perjudica esto en el mundo laboral?, etc.

Desde siempre, las tareas relacionadas con el cuidado, la higiene y la atención personal han sido asociadas a la mujer, dejando al hombre al margen de todas ellas, es decir, aunque la sociedad poco a poco va cambiando, antiguamente se vivía en un mundo completamente machista, y pensar que un hombre debía cuidar a un niño o niña o incluso cambiarle los pañales no estaba concebido en ese momento, sino que era la mujer quien debía encargarse de todo aquello. 

El mundo va evolucionando, y el objetivo del texto es dar voz a aquellos docentes hombres que si están interesados en la educación. El problema viene una vez en los centros, el genero masculino no se siente del todo incluido, dado que al existir tantos estereotipos (el hombre no sirve para esto, esto es cosa de mujeres, los hombres no encajan, esto es heterosexualmente sospechoso...), se consideran poco valorados, expulsados o invisibilizados. Rescatando una frase del texto "Los cuerpos que no encajan, es decir, el cuerpo del hombre, esta fuera de lugar". Estas desigualdades se crean por el miedo a lo desconocido y la desconfianza. 

Aquí es cuando entra en relación la película de "la caza", como podemos observar, el hombre por ser hombre, ya es cuestionado, existe un constante miedo a que si hay cualquier contacto por parte del profesor hacia el alumno o alumna, este sea interpretado de manera violenta, lo que daría lugar a acusaciones y al deshonor de la propia persona. Si un profesor de genero masculino realiza cualquier acto de afecto hacia un alumno/a (un abrazo mismamente) estará cuestionado y sera observado constatemente, sin embargo si ese acto de afecto lo realiza una docente de genero femenino, se es considerado de manera diferente, como un acto de cariño y se vería de manera dulce y tierna (aunque siempre existe alguna excepción). 

Como comentamos en la entrada de la película, el profesor (de genero masculino) era condenado a injurias por un acto que no había cometido, sin embargo, eso no dio lugar a que se realizase un análisis exhaustivo del caso para buscar la verdad, sino que al pertenecer a dicho genero y no poder demostrar su inocencia, fue acusado de manera inmediata y sentenciado por todos/as. 

A día de hoy, son los propios maestros que trabajan en la educación, los que afirman que reciben un trato totalmente diferente al que reciben las mujeres que trabajan con ellos, admiten que se sienten más observados y cuestionados, con la sombra de la amenaza de ser denunciados o con el miedo a ser castigados por la sospecha de no hacer bien su trabajo. También comentan que se sienten desprotegidos, y que tienen que medir sus pasos a la hora de realizar cualquier acto/contacto con sus alumnos/as, al contrario que sus compañeras que pueden dar un abrazo o un beso sin ser cuestionadas. 

Como menciona el texto, vivimos en una sociedad un tanto hipócrita, pretendemos enseñar a respetar a los demás, la multiculturalidad, la igualdad, y sin embargo realizamos acciones contradictorias. Para poder enseñar la igualdad primero debe ser cierta, por ello hay que dar un paso adelante y comenzar a cambiar las cosas, tales como dejar de creer que es un trabajo solo para mujeres y aceptar que existen hombres a los que también les gustaría dedicarse a la educación, ya que enseñar es uno de los trabajos más bonitos que existen. 

Para finalizar decir que este cambio si es posible con la ayuda de todos, primero hay que empezar a respetar este ámbito desde el inicio, es decir, desde la carrera de magisterio, ya que todavía se puede apreciar una mayoría femenina en las aulas, y considero que existen muchos hombres a los que les encantaría estudiar magisterio, pero por miedo a no ser aceptados o a considerarse menos valorados no lo hacen. 

Y por otro lado fomentando la igualdad, ya que si es un valor que queremos transmitir en las escuelas, primero hay que empezar por aplicarlas en cualquier ámbito, no solo en la educación, sino también en entornos como ingeniería, arquitectura, medicina... 

Luchemos por el cambio, para que todos y todas podamos vivir en una sociedad igualitaria, con los mismos derechos.

"La igualdad de género no puede ser solo una teoría, debe ser una realidad vivida"

 

Aquí os adjunto el link del texto por si os interesa leerlo, es un libro escrito por José Miguel Correa y Estibaliz Aberasturi Apraiz. Nosotros/as leimos el capitulo cuatro, pero os adjunto todo el archivo por si os interesa saber más del asunto, ya que el saber no ocupa lugar. https://addi.ehu.es/bitstream/handle/10810/15063/USWEB151367.pdf?sequence=1 

Espero que os haya gustado la entrada de este blog, ya que ha sido algo diferente a las demás. 

¡Un saludo y muchísimas gracias!

¡Hasta la próxima!